Pues ví el programa de "Espiral" y me entristece cómo gracias al bombardeo en los medios a los no especialistas les sigue quedando la idea de que Gerardo Jiménez inventó él con sus propias manos el DNA, vamos, desde decidir qué letras se ponían en el código genético. Y de ahí lo va a hacer una bola de cristal para ver de qué nos íbamos a morir pero ya no porque él solito nos va a curar a nosotros y a todo el país. Vaya, un prócer de la humanidad, seguro ya pronto le harán una estampita de esas que venden en la papelería.
Al menos los genetistas de verdad pudieron mencionar el hecho de que el "descubrimiento" de que los mexicanos somos mestizos a nivel genético no es para nada original, ni tampoco el que en distintas regiones del país la gente sea distinta, um, basta con vernos, ¿no?
Me gustó el comentario que se hizo en relación a que el consabido mapa era un bonito ejemplo de lo que se ha llamado "me too"-science, o sea ciencia de "yo también". Este tipo de ciencia consiste en ir y repetir un estudio de alguien más, igualito nomás que con nuestras propias canicas. Claro, no sin antes comprar el equipo costosísimo en el que el estudio se hizo en otro lado. La versión mejorada del INMEGEN incluye además la idea de que como al término del estudio el equipo costosísimo ya se hizo obsoleto, uno va y compra el modelo de nueva generación y repite el mismo estudio una vez más: "me too-science" reloaded.
Creo que el Canal Once sube a la red "Espiral". Vale la pena verlo, supongo, aunque el formato para gente con déficit de atención no permite un debate de verdad, creo yo.
lunes, 25 de mayo de 2009
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